Gobernanza global: China impulsa un sistema internacional más justo y equitativo
Xi Jinping presenta durante la cumbre de la OCS la Iniciativa de Gobernanza Global, respaldada por países como Rusia, Venezuela y Nicaragua, para crear un sistema internacional multipolar y equitativo.
2025-09-03
Durante la reciente Cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), el presidente chino Xi Jinping presentó su propuesta de un sistema de gobernanza global más equitativo y participativo. La iniciativa busca garantizar que todos los países, independientemente de su tamaño, riqueza o influencia, puedan formar parte de la toma de decisiones internacionales y beneficiarse de ellas. Según Xi, la gobernanza global actual enfrenta serios desafíos que requieren un replanteamiento integral de sus estructuras y principios.
Motivos de la iniciativa
El presidente Xi indicó que las mentalidades heredadas de la Guerra Fría, la hegemonía y el proteccionismo siguen afectando la cooperación internacional. La iniciativa propone un sistema más inclusivo que respete la igualdad soberana de los países y permita la participación efectiva de todas las naciones en los asuntos globales.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China publicó un documento conceptual que detalla la iniciativa, señalando que las instituciones actuales presentan tres problemas principales: el Sur global está infrarrepresentado, algunos países incumplen el derecho internacional y existe una creciente necesidad de mejorar la eficacia de las instituciones internacionales.
Xi afirmó que un mundo más justo requiere un sistema que no dependa de la hegemonía de unos pocos y que refleje los intereses de la mayoría de los países. La iniciativa busca que las decisiones sean más equitativas, transparentes y responsables, fortaleciendo la cooperación multilateral y evitando la imposición de normas unilaterales.
Pilares de la gobernanza global
La propuesta de Xi Jinping se basa en cinco principios fundamentales que guiarán la construcción de este sistema de gobernanza global:
Igualdad soberana: Todos los países deben ser respetados, libres de injerencias externas y con derecho a elegir su sistema de desarrollo. Esto incluye el derecho a participar activamente en la toma de decisiones internacionales y a obtener beneficios en igualdad de condiciones. Estado de derecho internacional: Los países deben cumplir con las normas existentes y liderar con justicia, evitando aplicar dobles estándares. Las grandes potencias tienen la responsabilidad de defender la supremacía del derecho internacional. Multilateralismo: Las decisiones y soluciones globales deben tomarse de manera conjunta, respetando la participación de todos los países y compartiendo los beneficios de manera equitativa. La práctica de acciones unilaterales debe ser evitada. Enfoque centrado en las personas: La gobernanza global debe priorizar el bienestar de los ciudadanos, promoviendo políticas que mejoren su calidad de vida y seguridad. Esto incluye garantizar que la población sea tanto actor como beneficiaria del sistema. Resultados concretos: El sistema debe abordar los problemas inmediatos y planificar soluciones a largo plazo. Los países desarrollados deben aportar recursos, mientras que los países en desarrollo deben colaborar para promover la paz, la seguridad y el desarrollo sostenible.
Estos cinco pilares buscan construir un sistema más justo, que represente a todos los países y permita una gobernanza global más eficaz y equilibrada.
Uso de las instituciones existentes
La iniciativa de gobernanza global no busca reemplazar instituciones internacionales como la ONU, sino fortalecer su eficacia y capacidad de adaptación a los desafíos modernos. Esto incluye la reforma de procesos internos, mejora en la toma de decisiones y mayor capacidad de respuesta frente a conflictos, crisis climáticas o económicas.
China destaca que las reformas no deben ser radicales ni destruir el orden internacional actual, sino complementarlo para lograr un sistema más inclusivo y eficiente. Esto permitirá que los países en desarrollo tengan más representación y que las decisiones reflejen de manera justa los intereses globales.
Además, se enfatiza el uso de plataformas existentes como la ONU y otras instituciones multilaterales regionales para coordinar la implementación de la iniciativa. Esto incluye áreas críticas como finanzas internacionales, inteligencia artificial, ciberseguridad, cambio climático, comercio y exploración espacial.
Apoyo internacional
El presidente ruso Vladímir Putin expresó que la OCS podría liderar la implementación del sistema de gobernanza global, respaldando la propuesta de China y mostrando disposición para debatir sobre medidas concretas. Putin destacó que un sistema equilibrado debe respetar el derecho internacional y la Carta de la ONU, garantizando oportunidades de desarrollo sostenible para todos los países.
Venezuela y Nicaragua también se sumaron a la iniciativa. Nicolás Maduro afirmó que la adhesión fortalece la paz, la cooperación regional y la estabilidad en América Latina y el Caribe. Nicaragua, por su parte, resaltó su compromiso con la soberanía y la autodeterminación, apoyando los principios de igualdad y multilateralismo propuestos por Xi Jinping.
Otros países de Asia, África y América Latina han mostrado interés en participar, lo que refleja un respaldo creciente a la iniciativa y un reconocimiento de la necesidad de un sistema de gobernanza más inclusivo y representativo.
Impacto esperado y desafíos
La iniciativa busca transformar la gobernanza global de manera que los países en desarrollo tengan más voz y se reduzca la hegemonía de potencias tradicionales. Esto permitirá un sistema más equilibrado, con decisiones más justas y responsables.
Los desafíos incluyen la coordinación entre países con intereses diversos, la reforma de estructuras complejas y la resistencia de algunas naciones a perder influencia unilateral. Sin embargo, los líderes de la OCS y los países aliados confían en que la cooperación y el compromiso con los principios de igualdad y multilateralismo serán la clave para superar estos obstáculos.
En resumen, la iniciativa de gobernanza global de Xi Jinping busca crear un mundo más equitativo, eficiente y sostenible, donde todos los países participen activamente y los beneficios sean compartidos de manera justa. La propuesta resalta la importancia de la cooperación internacional, la igualdad soberana y el enfoque centrado en las personas como pilares de un nuevo sistema global que responda a los retos del siglo XXI.
