Cumbre de los BRICS: cómo Rusia quiere expandir su poder
Rusia ve en la organización BRICS sobre todo una posible forma de eludir las sanciones occidentales. Les explicamos qué planes persigue Moscú y sus posibilidades de éxito.
2024-10-24
En la ciudad rusa de Kazán se desarrolla la cumbre anual de los países BRICS, la decimosexta desde su fundación, en 2006. Participan 24 jefes de Estado y de Gobierno, entre ellos, el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
En la última cumbre, en Sudáfrica, Putin no apareció. Canceló su asistencia, aparentemente porque temía ser detenido debido a la orden de arresto emitida en su contra por la Corte Penal Internacional de La Haya, reconocida por Sudáfrica.
A los estados BRICS originales, Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, se unieron cuatro países más en 2024: Egipto, Etiopía, Irán y los Emiratos Árabes Unidos. Desde Moscú se comenta que el interés por la organización está creciendo. 34 Estados querían cooperación "en diversas formas", incluidos algunos de la Comunidad de Estados Independientes (CEI, antiguas repúblicas de la Unión Soviética), África, América del Sur y el Sudeste Asiático. En la cumbre de Kazán se discutirá el formato ampliado BRICS Plus para aumentar la importancia económica y política de la organización.
Un sistema de pago global
Uno de los temas principales del encuentro es el sistema de pago conjunto BRICS Bridge, una plataforma digital de pago que presentó el Ministerio de Finanzas de Rusia a principios de octubre de este año. Su objetivo es permitir pagos transfronterizos "rápidos y baratos" entre Estados miembros en monedas locales, incluido el uso de tecnologías blockchain y monedas digitales de bancos centrales, sin pasar por bancos en EE. UU. Según la revista The Economist, Moscú quiere así evitar sanciones internacionales que impidan a Rusia realizar pagos transfronterizos en dólares estadounidenses.
El planeado sistema de pago alarmó a las autoridades financieras occidentales. Sin embargo, es complicado montar un sistema de pago de ese tipo. Los participantes tendrían que aportar una importante ayuda estatal y el sistema podría imponer una pesada carga a los reguladores nacionales si un Estado acumula reservas en la moneda nacional de otro. El motivo de Rusia es claro, dice The Economist, pero ¿por qué los demás países BRICS necesitan un sistema de pagos de ese tipo?
Atractivo para países en vías de desarrollo
Evgeny Kogan, de la Escuela Rusa de Economía, dice en su canal de Telegram Bitkogan que la organización BRICS hasta ahora ha mostrado poca voluntad de proteger a Rusia de las sanciones internacionales. El banco de desarrollo fundado por los países BRICS se sumó a las sanciones contra Rusia en 2022. Kogan también señala la siguiente relación: la población total de los países BRICS, de 3.500 millones de personas, representa alrededor del 45 por ciento de la población mundial, mientras que su participación en el producto interior bruto (PIB) mundial es del 37,3 por ciento. Su conclusión: "Es demasiado pronto para hablar de un nuevo orden mundial".
Los países en vías de desarrollo, empero, tendrían, desde todo punto de vista, interés en la organización BRICS y su sistema de pago. "No para provocar el enojo de Estados Unidos, sino como posibilidad para realizar pagos realmente rápidos”, escribe el economista. Los bancos corresponsales de Estados Unidos provocan una ralentización de un cinco a un siete por ciento de los pagos internacionales en dólares estadounidenses debido a las normas de cumplimiento, dice. Dichas regulaciones deberían proteger, entre otras cosas, de negocios con información privilegiada, lavado de dinero y financiación del terrorismo. Kogan critica que los Estados BRICS representan una "visión filosófica de un orden mundial ineficiente e injusto”.