Dos semanas después de haber anunciado un histórico salvataje financiero a Argentina, el Gobierno de EE.UU. todavía no ha concretado la ayuda, lo que mantiene en incertidumbre a un país urgido de fondos. El retraso del auxilio, que se supone será de 20.000 millones de dólares, complica al presidente Javier Milei en víspera de las elecciones legislativas del próximo 26 de octubre. Los comicios, ya opacados por escándalos dentro del oficialismo, han provocado una debacle en la popularidad del Gobierno, según algunas encuestas.
Los problemas son extensivos al presidente de EE.UU y Milei., Donald Trump, ya que políticos, economistas, periodistas y analistas financieros advierten que no hay justificación alguna para rescatar a Argentina. La situación coloca a ambas administraciones en un contexto de alta presión y vigilancia internacional.
Antecedentes del anuncio
El pasado 22 de septiembre, el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, afirmó que EE.UU. haría «todo lo que fuera necesario» para ayudar a Milei, quien al día siguiente sostuvo su primera reunión bilateral con Trump en Nueva York. El mandatario republicano ratificó su apoyo y expresó la intención de mantener el respaldo económico, pero la concreción del rescate aún está pendiente.
En los días previos al mensaje de Bessent, el mercado argentino había mostrado signos de tensión: el dólar comenzó a subir, las reservas a mermar, los bonos a desplomarse y el riesgo país a aumentar. Las declaraciones del funcionario estadounidense generaron un alivio temporal en los mercados, pero dicho efecto positivo duró apenas un par de días.
La urgencia económica
La incertidumbre se intensifica conforme se acercan los próximos vencimientos de deuda externa. La escasez de reservas, sumada a la incógnita sobre el plazo exacto para la presunta inyección de fondos estadounidenses, ha generado alarma en el sistema financiero y entre los acreedores internacionales.
Los nuevos mensajes de Bessent y de la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, en favor de Milei, no han sido suficientes para tranquilizar a los inversores, quienes esperan que la transferencia de dinero se materialice. La falta de certezas genera volatilidad en el tipo de cambio y presión sobre el Tesoro argentino.
Gestiones en Washington
El ministro de Economía, Luis Caputo, viajó de manera urgente a Washington para reunirse con Bessent y Georgieva, como previa al segundo encuentro que Milei sostendrá con Trump en la Casa Blanca. Este desplazamiento busca agilizar las negociaciones y asegurar que la promesa de 20.000 millones de dólares se cumpla en los plazos necesarios.
Según informes del diario Ámbito Financiero, el Tesoro argentino cuenta actualmente con solo 700 millones de dólares disponibles, cifra insuficiente para contener la presión sobre el dólar y enfrentar los próximos vencimientos de deuda, lo que hace imperativa la llegada del rescate prometido.
Contraste con la gestión interna
Mientras Caputo negociaba en Washington, Milei ofreció un recital en Buenos Aires, recibiendo críticas por el contraste entre sus festejos y la situación económica del país. Este tipo de actos públicos ha reavivado los cuestionamientos en Estados Unidos sobre la conveniencia de destinar recursos a un Gobierno en plena crisis de popularidad y con incertidumbre política.
El recital, que buscaba proyectar normalidad y entusiasmo en medio de la campaña electoral, fue interpretado por algunos expertos como una distracción frente a la realidad económica. Analistas argentinos sostienen que la combinación de eventos internos y retraso en el auxilio estadounidense podría afectar la confianza del mercado y la percepción internacional sobre la estabilidad financiera del país.
Críticas en EE.UU.
En medio de la controversia por el rescate que aún no se concreta, figuras públicas estadounidenses han expresado su desacuerdo con la decisión. El escritor Don Winslow ironizó sobre la situación, repostando videos del concierto de Milei y criticando la asistencia económica de 20.000 millones de dólares.
El columnista de Bloomberg, Matthew Yglesias, también cuestionó la medida: «Consíganle a este hombre su rescate de 20.000 millones de dólares», escribió, señalando el descontento de parte de la opinión pública estadounidense. Por su parte, el senador demócrata Chuck Summer criticó la aparente facilidad con la que Trump dispone de fondos para rescatar a Argentina, mientras recorta recursos en áreas sensibles como atención médica y controladores aéreos.
Impacto en la economía argentina
El retraso en la ayuda de EE.UU. ha generado un aumento en la volatilidad del dólar y en los riesgos percibidos por los inversores. Analistas locales aseguran que la falta de claridad sobre la fecha de llegada del rescate provoca incertidumbre en los mercados de bonos, genera presión sobre la inflación y afecta la confianza de empresarios y consumidores.
Los sectores productivos y financieros del país observan con preocupación cómo se desarrollan las negociaciones de Milei, conscientes de que la concreción del salvataje podría determinar la estabilidad económica inmediata y la capacidad del Gobierno para cumplir con sus obligaciones internacionales.
Escenarios políticos y económicos
El aplazamiento del auxilio financiero también tiene implicaciones políticas. Milei enfrenta un escenario electoral complejo, con cuestionamientos a su gestión y escándalos dentro de su coalición. La demora en la ayuda estadounidense podría influir en la percepción del electorado y en los resultados de las elecciones legislativas del 26 de octubre.
Al mismo tiempo, EE.UU Milei. debe equilibrar la presión interna y las críticas de políticos y medios respecto al uso de fondos públicos para rescatar a un país extranjero. Las decisiones que se tomen en los próximos días serán clave para definir la relación bilateral y la estabilidad financiera de Argentina.
Conclusión
La promesa de Estados Unidos de inyectar 20.000 millones de dólares a Argentina mantiene al Gobierno de Milei en un estado de espera angustiosa. La incertidumbre sobre los plazos, combinada con la escasez de reservas y la proximidad de vencimientos de deuda, coloca a la economía argentina bajo una presión intensa. Mientras tanto, las elecciones legislativas se aproximan y la administración enfrenta críticas tanto internas como externas, lo que convierte el futuro económico y político del país en un asunto crítico a nivel internacional.
Información Cortesía de RT
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